Las nuevas joyas de la naturaleza Patrimonio de la Humanidad
La lista de joyas de la naturaleza Patrimonio de la Humanidad se amplía, el Comité de la UNESCO, reunido estos días en Brasilia, ha decidido incluir seis nuevos parajes en su lista de Patrimonio Mundial Natural. Los paradisíacos paisajes de la isla francesa de Reunión, la meseta de Putorana (situada en el sur de la península rusa de Taimir), las islas Fénix de Kiribati y Danxia (en China) han sido añadidas a este listado.
Asimismo, se aprobó incluir el Parque Nacional Pirin de Bulgaria y la zona italiana del Monte San Giorgio, una montaña boscosa situada entre el cantón del Tesino de Suiza que ya había sido declarada Patrimonio Mundial Natural en 2003 por la presencia de fósiles del Triásico.
La decisión adoptada este lunes amplía ese patrimonio con la inclusión de la parte italiana de la montaña, que se eleva a una altura de 1.097 metros.
Parque Nacional de la Isla de Reunión
tiene 100.000 hectáreas en el Océano Indico, está dominado por dos picos volcánicos y posee un conjunto de escarpaduras, desfiladeros y lagunas con bosques. La variedad y la importancia del hábitat natural ha sido uno de los aspectos considerados por el grupo reunido en Brasilia.
Las Islas Fénix, en Kiribati
La UNESCO apuntó asimismo en la lista el nombre de las Islas Fénix, son 408.250 kilómetros terrestres y marinos situados en el Pacífico Sur, que constituyen la mayor reserva marina protegida del mundo, con uno de los mayores ecosistemas coralinos intactos del planeta, así como 14 montañas sumergidas.
Putorana – Siberia
en Rusia, fue considerado un sitio de «excepcional» belleza por los expertos, que valoraron además el estado de preservación de las más de mil cascadas y 25.000 pequeños lagos ubicados en esa región de Siberia.
Danxia, en China
Asimismo, entre los sitios naturales, el grupo incorporó «las nubes rosadas» de Danxia, constituido por seis áreas situadas en la zona subtropical del suroeste del país asiático y caracterizadas por una gama de relieves esculpidos por la erosión. Allí viven numerosas especies de flora y fauna, 400 de ellas consideradas raras o amenazadas.
El Parque Nacional de Pirin – Bulgaria
es parte de la lista de la UNESCO desde el año 1983 y se ha extendido ahora para abarcar unas 40.000 hectáreas de los montes de Pirin, lo que significa la totalidad del parque nacional, con la excepción de dos zonas turísticas dedicadas al esquí. La altitud del lugar oscila entre los 1.008 y los 2.914 metros.